jueves, 4 de junio de 2009

A Los Que Amamos A Los Animales...



Soy un rescatador de animales.
Mi trabajo es asistir a las criaturas del señor.
Adopto nuevos miembros de mi familia sin un plan, pensamiento o seleccion.
He comprado alimento para perros con mis ultimos centavos.
He acariciado una cabeza con sarna con mis manos desnudas.
He abrazado a alguien malvado y asustado.
Me he enamorado miles de veces y he llorado sobre un cuerpo sin vida.
Tengo animales amigos y amigos de los animales.
No uso a menudo la palabra "mascota".
Veo a los perdidos a la vera del camino y me duele el corazon.
Llevaria conmigo un ratoncito o me haria amiga de un buitre.
No conozco a ninguna criatura que no merezca que yo le dedique mi tiempo.
Quisiera vivir para siempre si no hay animales en el cielo.
Aunque creo que los hay.
¿Por que dios crearia algo tan perfecto para luego dejarlo de lado?
Nosotros podremos ser los amos de los animales, pero los animales se han superado a si mismos. Algo que la gente no ha logrado.
La guerra y los abusos me duelen pero algun rescate en las noticias me da esperanzas por la humanidad.
Somos un ejercito silencioso pero determinado que hacemos la diferencia cada dia.
No hay nada mas necesario que darle calor a un huerfano, nada mas regocijante que salvar una vida ni reconocimiento mas grande que verlos mejorar.
No hay alegria mas grande que ver a un cachorro jugar, el mismo que hace algunos dias estaba tan debil para comer.
Rescato animales.
Mi trabajo nunca termina.
Mi casa nunca esta en silencio.
Mi billetera esta siempre vacia.
Pero mi corazon esta siempre lleno.
En el juego de la vida...

NOSOTROS YA HEMOS GANADO.

El Es Mi Perro!!!

El son los ojos con los que puedo ver mas allá de las nubes, los oídos que me permiten oír mas allá del refugio del viento. Es la parte de mi capaz de llegar hasta el mar.

Mil veces me ha dicho que soy la única razón de su existir, cuando se apoya confiado en mis piernas; cuando agita la cola con alegría frenética al descubrir la mas imperceptible sonrisa en mis labios; cuando expresa tantísimo dolor al verme salir sin el (yo creo que es por que el le preocupa lo que me pueda pasar sino esta ahí para protegerme). Cuando soy injusto, no duda en perdonarme; cuando me enfurezco, se hace el payaso para arrancarme una sonrisa; cuando me ve feliz, el jubilo se desborda; cuando hago el ridículo, parece no darse cuenta; pero cuando tengo éxito, se pavonea orgullosisimo de mi. Sin el, yo no seria mas que un hombre corriente, pero el me hace ser todo poderoso. El es la encarnación de la lealtad. El me ha hecho comprender lo que significa ENTREGA. Gracias a el conozco este secreto bienestar, esta maravillosa paz interior.

Gracias a el entiendo tantas cosas que antes ignoraba por completo… apoyando su cabeza en mi rodilla, cura todas las heridas de mi corazón. Si el esta a mi lado, ya no temo a la oscuridad ni a lo desconocido. El me ha prometido esperar, no importa cuanto, no importa donde… esperar hasta que yo lo necesite. Y ahí estará, igual que ha estado siempre:


¡El es mi perro!


Gene Hill, He´s Just My Dog Tears And Laughter, 1997